domingo, 15 de mayo de 2011

Conclusión



C O N C L U S I Ó N

Al término de esta segunda jornada y reflexionando sobre mi trabajo, me siento realmente satisfecha de los resultados obtenidos, pues para empezar el trabajo con el grupo considero que fue mejor, así como logré captar su atención y poder expresarme mejor, controlar los nervios y poder hacer bromas o comentarios que rompieran la tención, siento que no fue necesario ser muy rígida con ellos para que prestaran atención y trabajaran, al parecer también les interesaron las actividades, pues fueron algunos de los comentarios que escribieron en la hoja que les pedí.

En las hojas de comentarios, no encontré la crítica que esperaba, solo hicieron comentarios positivos, no se si decir entonces que para ellos fue satisfactorio el trabajo realizado, algunos me escribieron que no hay nada que mejorar, aunque yo sé que si, tal como controlar un poco mas el tiempo, que fue algo que algunos alumnos comentaron, que disponían de poco tiempo para las actividades, otro alumno comentó entre las cosas que no le agradaron fue que no me aprendí el nombre de todos.

Veo que con esto que es importante para ellos cuando se les llama por su nombre y se les toma en cuenta, pero desafortunadamente en estas dos jornadas es casi imposible reconocerlos a todos y más porque las jornadas se llevan a cabo en semanas separadas.

Se que aun puedo mejorar en cuanto a mi expresión frente al grupo, ampliando también mi conocimiento sobre cada tema y de esta manera me será mas sencillo conducir al alumno al cumplimiento del objetivo, responder dudas de manera mas clara.

Sin embargo también estoy consiente que eso será poco a poco, en el transcurso de lo que me resta de la carrera, ya que no puedo llegar a las prácticas siendo perfecta, pero si perfeccionándome con cada una de ellas.

Finalmente, considero que esta práctica me ha dejado la enseñanza de que es importante dejar bien en claro cada aspecto estudiado y que se cumpla la intención didáctica pues de lo contrario, si se deja al aire, las siguientes actividades serán más complicadas para que lo puedan entender, si alguna parte parece muy sencilla, ampliarla mas, a fin de que el alumno tenga conocimientos suficientes y un poco mas.

Termino esta jornada satisfecha y con muchos deseos de seguir mejorando.

viernes, 6 de mayo de 2011

Día 4



M  A  T  E  M  Á  T  I  C  A  S
7:30 – 8:20

El día de hoy esperábamos suspensión de clases y trabajar el viernes, sin embargo cambiaron el día, trabajar hoy y suspender el viernes, por lo que la planeación solo la cambié para el día de hoy, desafortunadamente a mi llegada observé que estaban instalando el sonido y pregunté al director si habría Honores a la bandera, el me indicó que sí, que serían en el primer módulo, esta situación yo no me la esperaba, me sentí preocupada pues pensaba revisar entre todos los ejercicios de tarea y así repasar un poquito antes de la evaluación, además que tenía una reflexión para compartir con ellos.

Después de los honores a la bandera, me di cuenta que tenía tiempo suficiente para que contestaran la evaluación, que por cierto tuve que modificar de ultima hora para adaptarla a lo que la maestra me solicitó ayer, eran dos definiciones y un ejercicio.

El grupo estaba muy inquieto, y pedí a dos compañeros que repartieran las evaluaciones y les dije: Entre mas tiempo sigan de pie, menos tiempo van a tener para contestar su hoja de trabajo, ya perdieron como 5 minutos, entonces ellos voltearon un poco preocupados y se fueron sentando. Saludé entonces y ellos respondieron, indiqué que era muy sencillo el ejercicio que harían en ese momento, pero que debían hacerlo en silencio.

Comenzaron a trabajar en ello, tomé asistencia y pasé entre las filas, algunos tenían la hoja en blanco, otros se fueron directamente al problema, pasaron unos minutos y observé que pocos tenían contestada la parte de las definiciones, entonces dije en voz alta que los dos primeros era de lo mismo que vimos ayer, una alumno comentó: pero es que no me acuerdo así como lo dictó ayer, entonces di oportunidad a que lo escribieran según se acordaran y lo entendieran, pero que fuera de manera explícita y ya yo vería si era correcto o no.

Les indiqué que recordaran algunas situaciones específicas que yo sabía les ayudarían a escribir o recordar las definiciones, tales como la fórmula de la probabilidad y qué representa el numerador y denominador, algunos de ellos parecían reaccionar ante las ideas que les daba, otros seguían con la hoja en blanco. Una alumna, Daniela, se veía en realidad preocupada, pues su hoja únicamente tenía el nombre, me sentí  mal, ya que ella es una buena alumna, sin embargo había faltado, situación por la que se perdió de parte esencial del tema para que pudiera comprender las definiciones y recordarlas.

Ella me miró y me dijo: Maestra, es que yo no vine ese día, yo le dije que no podía hacer excepción con ella y que todos debían realizar la evaluación.

Pasaron 10 minutos y la mayoría tenía contestada la hoja, para esto había solicitado que no se pusieran de pie, que todos la entregarían al mismo tiempo. Entonces indiqué que de atrás hacia adelante la fueran pasando y únicamente yo recogería las del frente, así lo hicieron.

Mientras ellos hacían esto, escribí en el pizarrón la siguiente frase:

“No te preocupes por lo que cosechas hoy, 
sino por lo que siembras para el mañana.”

Algunos preguntaron, ¿Qué significa eso, maestra?, yo indiqué que en un momento lo veríamos.

Entregué a dos alumnos uno papelitos con la reflexión de “La siembra y la cosecha”, mismos que repartieron a sus compañeros mientras yo recogía las evaluaciones.

Entonces pedí cuatro voluntarios, que leyeran cada punto de esta ley que le había entregado.

El primer alumno leyó:
 LA LEY DE LA SIEMBRA Y LA COSECHA:
1.- Siempre sembramos algo

El siguiente:
2.- Siempre se cosecha lo mismo que has sembrado, no puedes sembrar frijol y cosechar maíz. (Algunos alumnos se rieron, otros en voz baja dijeron: ¡pu´s si!)

El tercero:
3.- Siempre cosechamos más de lo que sembramos, si sembraste unos granos de maíz, cosecharás mazorcas completas. (Nuevamente se oyeron ricitas y algunos dijeron: si es cierto)

El último:
4.- Tarde o temprano hemos de cosechar, pues de tantas semillas una ha de dar fruto.

El grupo permanecía atento

Entonces agregué yo haciendo una analogía:

Nuestra vida es igual y aplica la misma ley:

1.- Siempre vamos sembrando algo: buenas y malas acciones, buenos y malos sentimientos

2.- Si has sembrado amor, no vas a cosechar odio, si siembras paz no cosecharás problemas

3.- Nuestros actos siempre traen más de lo que pusimos, si hiciste un chisme, en un momento será mayor y después quizás hasta hagan un chisme de ti, mayor o peor del que tú has hecho.

4.- Después de tanto que hacemos en la vida, algo se nos ha de regresar, quizás no en el mismo momento ni de la persona a quien se lo hicimos, pero tarde o temprano ha de llegar.

El grupo permaneció en silencio, las expresiones en sus rostros…. No las puedo describir, era realmente conmovedor verlos, su expresión de estar reflexionando, algunos viendo sus hojitas en el mesa banco, otros me observaban, agregué entonces, algunos de ustedes me entregaron sus evaluaciones en blanco, eso es triste, pero saben que, es consecuencia de sus actos y aunque yo quiera no puedo cambiarlos, ni ustedes podrán hacerlo ya, como se los dije con la reflexión del lápiz (la jornada pasada), la goma no siempre puede borrarlo todo.

Diana, una de las alumnas que me lo entregaron en blanco, tenía los ojos llorosos, realmente me conmovió, pasé y toqué su hombro, ella me vio y me dijo: ¡Gracias Maestra!, en ese momento se me hiso un nudo en la garganta.

 Finalmente pedí a un alumno que leyera lo que yo había escrito en el pizarrón y agregué: sólo les dejo este consejo:

(El alumno leyó)

 “No te preocupes por lo que cosechas hoy, 
sino por lo que siembras para el mañana.”

Varios alumnos, incluida Daniela: ¡Gracias maestra!
Un alumnos agregó, va a ver que si le voy a hacer caso yo, otro agregó, yo también pa´ya no tener tantos problemas…

Restaban alrededor de tres minutos y pedí entonces que en una hoja de su libreta escribieran algún comentario sobre el trabajo que realicé con ellos, pues estoy aprendiendo a ser maestra y necesito saber en qué puedo corregirme, qué es lo que les gustó y lo que no les gustó, o alguna sugerencia para mejorar mi trabajo.

Un alumno me preguntó: ¿y le tengo que poner mi nombre? Se oyeron algunas risas y les dije que no era necesario, lo que mas me importaba era su opinión y sugerencias, si no deseaban poner el nombre, no lo hicieran, no beneficiaría ni afectaría su calificación (nuevamente se oyeron algunas risas) pero si me importaba que fueran muy sinceros para yo mejorar.

Pedí que conforme terminaran me dejaran la hoja y su libreta en el escritorio.

Sonó el timbre y me entregaron lo solicitado, aunque no todos. Me despedí de ellos  y me dijeron: ¡Gracias maestra!, algunos otros ¡Adiós!

Al retirarme, me sentí satisfecha con el trabajo realizado y con el mensaje que compartí con los jóvenes, pues considero que es lo que muchas veces falta, instruirles un poco respecto a la vida, y que no tomen las cosas tan a la ligera. Además que el agradecimiento que me dieron, fue motivante para mí.

miércoles, 4 de mayo de 2011

Día 3

 

M  A  T  E  M  Á  T  I  C  A  S
12:00 – 12:50

Para comenzar la clase del día de hoy, esperé un momento a que la maestra se presentara en el aula, pero al ver que no llegaba, decidí iniciarla, me puse de pie al frente y pedí silencio, varios continuaron hablando y únicamente me quedé observándolos, entre sus mismos compañeros les pidieron que guardaran silencio, entonces los salude, sin embargo pocos respondieron a mi saludo, y entonces le dije:

- Creo que no me escucharon, y repetí, ¡Buenas tardes jóvenes! entonces todos respondieron ahora al saludo y comenzamos a retomar la clase del día de ayer, recordando los problemas que habían quedado pendientes y que precisamente ayer revisé, en los que me di cuenta de diversas confusiones.

Como el día de ayer revisé libretas, tenía noción de los alumnos que contestaron totalmente erróneo los problemas y quienes tuvieron respuestas aproximadas, por lo que de ellos elegí a los alumnos que tenían las respuestas aproximadas para que pasaran al pizarrón y escribieran su respuesta y nos explicaran a todos el porqué de ella.

La primera pregunta fue:
·        ¿Cuál es la probabilidad de obtener un número par y menor que cuatro al lanzar un dado?

Encontré dos respuestas comunes que fueron 1/6 y ¼, cada una con una razón aparentemente lógica.

El joven Erik había respondido: ¼, la respuesta es aproximada, pues era correcto que sólo había un número par menor que cuatro, pero el análisis tenía un error, ya que estaba contando los números 1, 2, 3 y 4 como menores que 4, así que hice resaltar el hecho de que el 4 no es mayor que 4, el 4 tampoco es menor que cuatro, sino que el 4 es igual a 4, lo que es conocido como la ley de la tricotomía; es decir un número sólo puede ser menor, mayor o igual que otro, nunca dos a la vez.

Ya con esta aclaración, los alumnos que tenían la respuesta de ¼ encontraron su error y me dieron la respuesta correcta: 1/3

La siguiente pregunta fue:
·        Sabiendo que ya salió par, ¿Cuál es la probabilidad de que sea menor que cuatro?

Este es el problema al que ayer hacía mención Diana, que si bien no dice lo mismo textualmente, si expresan la misma idea, sin embargo ella en sus respuestas puso resultados diferentes, en el anterior 1/6 y en este 1/4, así que le solicité a ella, como habíamos quedado el día anterior, nos explicara porque son o no lo mismo, considero que gracias a la aclaración del ejercicio anterior le fue más fácil explicar:

-         Lo que pasa es que ya sabemos que es un par y el dado na´mas tiene 2, 4 y 6 como números pares, ¿verdad?, así es, respondí yo, ella continuó, entonces como ya dijo usted el 4 no es menor que 4 porque son iguales, así que menores que 4 sólo son el 1, 2 y 3 así que lo que es el espacio muestral se reduce a tres porque los otros números ya no cumplen la condición anterior y pu´s tenemos na´mas el 2 que cumple las condiciones, así que es 1 de 3

Varios alumnos se veían más conformes con los resultados y las explicaciones, así que pedí que las escribieran en sus libretas e hicieran los apuntes que consideraran necesarios para ellos, según lo que entendieron.

Esperé un momento y continuamos con el tercer problema:
·        Se va a realizar una rifa con boletos que han sido numerados del 1 al 200. Todos los boletos se han vendido. EL boleto ganador será el primero que se saque de una urna. Ana compró los boletos 81, 82, 83 y 84. Juan adquirió los boletos 30, 60, 90 y 120. ¿Quién tiene más oportunidades de ganar?

Como respuesta a esta pregunta, me dieron varias, entre ellas expresaban las siguientes ideas:

-         Juan, porque tiene números salteados
-         Ana porque tiene números pares y nones
-         Los dos porque no importa el número del boleto, sino la cantidad de boletos comprados

A los alumnos que tenían esas respuestas, pedí que pasaran a explicarnos, el grupo parecía confundido, pues las tres tenían una lógica. Finalmente, para sacarlos de la confusión pregunté cual era la condición que tenía para ser el boleto ganador, ellos respondieron que únicamente el primero  que se sacara de la urna, por lo que pregunté, ¿si es par ganará? Ellos respondieron que si, y agregué y ¿si es non, ganará?, ellos respondieron nuevamente que sí, entonces me dice un alumno (Omar), es que, Maestra, no importa qué número salga, na´mas con que sea el primero.

Por lo que entonces sacamos la probabilidad que tenían Ana y Juan, siendo 4/200  cada uno llegando a la conclusión que ambos tienen la misma oportunidad, una vez más pedí que anotaran el porque, mientras pasaba entre las filas y comentaba que siempre recordemos leer bien y encontrar tanto el espacio muestral como la condición. 

Pregunté también cómo se llamarían estas situaciones, ellos respondieron: probabilidades condicionadas, aunque no es el nombre correcto si es el aproximado.

Pedí entonces que anotaran de encabezado o título la palabra Glosario, y comenzaríamos entre todos a hacer las definiciones de las palabras que hemos estado usando en estos días, para esto la maestra titular me hiso señal de que me acercara a ella y me preguntó si yo tenía escritos los conceptos, yo respondí que sí y se los mostré en mi libreta, por lo que me indicó que únicamente se los dictara y no que ellos me ayudaran a construirlos, ademas que si les aplicaría alguna evaluación, se los incluyera en ella. Entonces así lo hice, comencé a dictárselos, sin embargo en ocasiones hacía preguntas tales como:

(Para la definición de probabilidad) ¿Se acuerdan que tema estamos viendo? Ellos respondieron, si, probabilidad, yo agregué, bueno, es nuestra primer palabra a definir.

Hice preguntas sencillas pero que mantuvieran al grupo en la clase, pues considero que el dictado únicamente hace que pierdan el interés.

Otra pregunta fue en la definición del evento dependiente e independiente (previamente definidos):

·        ¿Qué operación usamos en cada situación? Ellos respondieron, para los dependientes multiplicamos y para los independientes la suma.

Considero que el grupo se mantuvo interesado durante la elaboración del glosario y al finalizar una alumna (Zuleima) comentó: ¡ya le entendí maestra!, así si ya está bien claro, o sea que cuando usamos na´mas un dado era independiente, y por eso era 1/6, pero cuando usamos dos ya se hacía dependiente y se multiplicaba 1/6 por 1/6 y se hacía 1/36. 

Me dio gusto ver que lo había entendido y aunque ya se había visto eso en clase, parece que a ella aun no le quedaba claro, algunos de sus compañeros, en tono de burla dijeron: ¡Hay Zuleima, hasta que hora te das cuenta, eso ya lo había dicho Diana! (pues en las clases anteriores se había dado a notar esto) sin embargo yo pedí a los jóvenes que respetaran a su compañera no hicieran eso (la burla), pues no todos lo entendemos de la misma manera y lo importante es que lo ha comprendido, ella agregó, verdad que si maestra.

Teníamos entonces 5 minutos restantes de la clase y dicté unos problemas para que los hicieran de tarea y repasaran ahora con el glosario que habíamos escrito.

Al finalizar esta clase me sentí muy satisfecha, pues considero que fue buena la idea de elaborar un glosario, aun cuando la consigna no lo indica como tal y tampoco lo tenía previsto yo, ya que pude observar a varios alumnos más convencidos del trabajo y se logró la formalización del conocimiento, lo que ellos habían descubierto con el juego de los dados y monedas, así como la resolución de problemas ya tenía un sentido más lógico y establecieron la regla de un modo mas claro.

Hubiera preferido que ellos me ayudaran a establecer cada término, pues de esta manera yo podría ver hasta dónde comprendieron las situaciones y aclarar algunos posibles errores, sin embargo la maestra titular solicitó algo diferente y me tuve que adaptar a su manera de trabajar, ya que finalmente es su grupo.

Aun con todo esto considero provechosa la clase de hoy así como haber cumplido el objetivo establecido para esta semana, ya que mañana únicamente será la aplicación de la evaluación. 

martes, 3 de mayo de 2011

Día 2



M  A  T  E  M  Á  T  I  C  A  S
7:30 – 8:20

El día de hoy corresponde la clase en el primero módulo, sin embargo al llegar vi que faltaban muchos alumnos, incluso la maestra no se encontraba, por lo que decidí esperar un poco más, al paso de 5 minutos llegaron 2 alumnos únicamente, lo que me hiso pensar que ya no llegarían mas, por lo que entré y saludé al grupo, la mayoría continuaba en su plática, saludé otra vez y la mayoría se puso de pie, únicamente 3 alumnos seguían sentados, me quedé callada y sus compañeros fueron quienes les dijeron que se pusieran de pie, así que ya todos de pie saludé una vez más, contestaron a mi saludo e indiqué que se sentaran.

Quizás pueda parecer exagerado que espere a que todos se pongan de pie, sin embargo desde la jornada pasada observé que es una buena forma de lograr que desde el inicio todos pongan atención, además que por respeto se debe hacer, y así no me vean como su igual en ese momento, sino que me vean como la maestra y eso también me da más seguridad a mi para iniciar, pues se que su atención está hacia mi.

Comencé retomando lo último que vimos ayer, que eran los nueve treintaiseisavos, quienes representaban el número de casos favorables y el número de casos posibles. Ya que lo recordaron les dicté los problemas que habían quedado pendientes la clase de ayer para terminar el plan y no se perdiera la secuencia.


Algunos de estos problemas ya los habíamos contestado el día de ayer, tal como:

·        ¿Cuál es la probabilidad de que los dos dados, al lanzarlos simultáneamente caigan en número par?
·        ¿Cuál es la probabilidad de que en ambas caras aparezca el mismo número?

Por lo tanto a los alumnos se les facilitó más la resolución de los ejercicios, los otros ejercicios fueron:

·        ¿Cuál es la probabilidad de que la suma de sus caras sea igual a 10?
·        ¿Cuál es la probabilidad de que la suma de sus caras sea igual a 10 o igual a 6?
·        ¿Cuál es la probabilidad de que la suma de sus caras sea igual a 10 y en ambas caras aparezca el mismo número?

Gracias a estos ejercicios, los alumnos llegaron a la primero regla, la de la adición,  que consiste en sumar las probabilidades de eventos independientes que no pueden ocurrir al mismo tiempo.

Al principio no fue tan sencillo, pues en el ejercicio 4, la respuesta de los algunos alumnos fue de: 3/36 y 5/36, lo que era parcialmente correctos, pues aun se tenía que sumar, sin embargo una alumna (Diana) llegó al resultado: 8/36 y le pedí que nos explicara de donde salió ese 8, entonces pasó al pizarrón y nos explicó:
-         Es que miren, tenemos 36 aquí (señalando la tabla) entonces de esos queremos los números que sumen 6 ó 10, cualquiera de todos esos, no importa cual caiga primero, entonces yo busqué todas las opciones que suman 6 y 10 y en total son 8, así que yo digo que son 8 de 36

Entonces pregunté a los alumnos si era lógico y correcto lo que hiso Diana, la mayoría respondió que si, el resto permaneció en silencio, para que los alumnos entendieran la relación de los eventos, pedí que escribiera la probabilidad por separado y las anotó en el pizarrón: 3/36 y 5/36, les pedí que observaran que relación tenían esos valores con el resultado que dio  Diana, y varios alumnos respondieron que si los sumamos tendríamos lo que dijo Diana, así que agregué, ¿afectaba que fueran dos números diferentes los que quería?, ellos respondieron que no, pues cualquiera me serviría.

Pregunté si quedaba alguna duda respecto a lo realizado hasta ahora y los resultados, la mayoría respondió que no.

Con esto concluimos la clase de ayer y les comencé a repartir una moneda de chocolate para la siguiente actividad, sin embargo vi que varios alumnos ya buscaban la manera de abrirla, así que les pedí que no se la comieran o no podrían realizar su actividad, se oyeron varias risitas y un alumno (Alam) me dijo: ¡ay maestra! ¿Nos vamos a tardar mucho?, es que ya se me antojó, las risas no se hicieron esperar al ver que su compañero simuló morder la moneda, el desorden comenzó en el grupo, entonces dejé de repartir las monedas y les dije:
-         Si van a empezar con el desorden, recojo las monedas y trabajamos así

El grupo entonces dejó de hacer ruido, con las monedas en las manos los observé y les dije:
-         Entonces… ¿Qué hacemos?

Algunos respondieron:
-         Mejor ya nos callamos maestra

Me sentí un poco mal por haberles llamado la atención por una broma tan sencilla, sin embargo no vi otra opción, pues el grupo comenzaba a salirse de orden y quería evitar que lo tomaran a juego.

Terminé de repartir la moneda y les pregunté si habían jugado un volado en alguna ocasión, varios respondieron que si,  pedí entonces que observaran bien la moneda y pregunté cuantos lados tenía, ellos respondieron: Dos, águila y sol, y agregué: entonces ¿qué probabilidad tienen de ganar en un volado? Ellos respondieron que ½, como el tiempo se estaba terminando, ya no pude aplicar una actividad extra que tenía preparada para que manipularan mas tiempo las monedas, que consistía en jugar primero con una sola moneda y anotar las posibilidades, luego reunido con un compañero lanzar las dos monedas y anotar las posibilidades, luego de tres compañeros (y sus monedas) y finalmente de 4 compañeros, con el fin de que reafirmaran lo que es un espacio muestral y con esto dar introducción a la siguiente regla, la del producto.

Continué entonces con las actividades ya planeadas, dictándoles los ejercicios correspondientes, pero esta ocasión mezclando un dado y una moneda, para esto los alumnos se mostraban confundidos, así que para guiarles, pedí a varios alumnos que lanzaran su moneda y su dado al mismo tiempo, así lo hicieron y pedí los resultados apuntándolos en el pizarrón, con esto les pregunté: ¿Serán las únicas combinaciones que podemos hacer? Ellos respondieron que no, así que pedí que buscaran todas las posibles combinaciones, Diana, respondió entonces: son doce maestra. Me sorprendió que respondiera tan rápido y le pregunté: - ¿Por qué lo dices Diana?

Ella me miró como insegura y me respondió: pues si multiplicamos las dos caras de la moneda por las seis caras del dado tenemos doce caras ¿no?; si tono era de duda, por lo que supuse que no estaba muy convencida de su respuesta y agregué, haber, has las combinaciones haber cuantas encuentras, entonces todos comenzaron a hacerlas, sin embargo me preguntaron:
-         ¿En tabla como los dados? O ¿cómo le hacemos?

Sugerí entonces un diagrama de árbol que comencé a ilustrar en el pizarrón, una alumna comentó: Ah! Es como el que estoy haciendo, mientras que otra joven dijo: ¡hay, Yo hice una tabla!, entonces les dije que no se preocuparan, que de cualquier manera es correcto, lo importante es que encontraran las opciones.

Diana comentó entonces, maestra el b y el c dicen lo mismo, yo, sabiendo que no era lo mismo textualmente pero si expresaban la misma idea le respondí: ¿segura Diana?, ella me vio y me dijo: pu´s eso parece, entonces le dije, léelo bien para que ahorita nos explique porque si o porque no. En seguida sonó el timbre y les indiqué que esos problemas los terminarían de tarea, mientras tanto que dejaran su libreta en el escritorio, pues las revisaría hoy.

Considero que gracias a que ayer dedicamos más tiempo a que quedara claro lo correspondiente al espacio muestral, fue posible que hoy no presentaran tantas dificultades al resolver los problemas, durante la revisión de libretas, observé que algunos jovenes tenían incompletos algunos ejercicios, y anoté algunas observaciones en sus libretas, tambien algunos ejercicios que estaban mal, pedí que los corrigieran, señalando con rojo el error y en algunos casos, anotando preguntas o pistas que le permitieran encontrar el camino a la respuesta correcta
.